Me han pasado, anónimamente por Telegram, las 3 verdaderas condiciones que impuso el Profesor intelectual de las gafitas redondas, tipo «yo he venido a hablar de mi libro», a la próxima presentadora de las 12 campanadas de la Primera del Gobierno en la plaza del Sol de Madrid.
El profesor y la alumna, tras un año de decirse guarradas por Instagram, al igual que hizo el chef con el cirujano, planificaron un encuentro REAL.
Así como el chef lo invitó a la Fiesta de la Luna Llena en Tailandia, la futura presentadora de las 12 campanadas le citó en una casa de unos amigos que tenía habitaciones con pestillo interior, por si acaso…
Y el profesor le propuso a la colegiala 3 condiciones para pasar del mundo virtual al mundo real.
Primera condición. Tendrás que venir vestida de colegiala, con una faldita corta y luciendo un buen escote, y con los pechos un poco fuera, desbordando el vestido. Y si cumples esta primera condición tendrás derecho a la primera recompensa: una chupadita, con un límite de 3 minutos, no más, que entonces se me desgasta y se me estropea para futuras citas políticas.
Segunda condición: Si tus tetas son como las que me has enseñado en Instagram y en Telegram y no son de photoshop ni airbags generados por la Inteligencia Artificial, tendrás derecho a la segunda recompensa: un buen polvo por delante para dejarte contenta, satisfecha y relajada por muchos días.
Tercera condición: Sube la apuesta. Te haremos una llamada simulando un «peligro inminente» para hacerte desistir de querer coger y tomar al Gran Predicador Blanco, Hetero y Puro, y el gran defensor del feminismo woke, y demostrar que lo deseas muy ardientemente y no sólo a fuego lento. Si pasas deportivamente de la llamada tendrás la oportunidad de una gran estocada por detrás de tu héroe y Salvador y serás mi futura María Magdalena si algún día estás caliente y quieres disipar esa pasión con un Salvador, y hasta me vestiré de cura, con un misal en una mano y una fusta en la otra, si esos son tus deseos.
Vamos a ver los resultados:
Primero: Pestillo hubo, manubrio al aire también hubo… pero, por lo que se ve en su primera entrevista a okdiario las tetas eran de photoshop y el resto del cuerpo nada tenía que ver con las fotos del «book de la actriz» que le pasó, vía Instagram, al Profesor intelectual. No tuvo derecho a la mamadita. Primera decepción de la colegiala. Se quedó con las ganas de chuparla.
Segundo: El taxi era de Uber. Tenía los cristales de fuera ahumados y un cristal separador, tintado e insonorizado, entre el conductor y los amantes. Parece que hubo llamada al móvil… pero el Profesor no se atrevió a meter el churro por si se le podía estropear y no poderlo utilizar en el futuro ante las expectativas de poder encontrar colegialas más atractivas, cosa relativamente fácil de cumplir visto el desfase del mundo virtual con el real sin airbags ni photoshop. Esto no es lo que he comprado, diría el Profesor chiflado. Que me devuelvan el dinero… Segunda decepción para el Profesor y segunda decepción para la colegiala. Se había quedado sin la mamada y también, no ya mal follada, que pasa muchas veces, sino sin ser follada, peor aún…
Tercero. La colegiala, aún decepcionada, seguía esperanzada de que el Profesor, cediera, y fuese capaz de metérsela por detrás, como le había prometido en la Cátedra. Vamos a ver si, viendo una película porno, del Gran Hermano o Supervivientes, se anima y me la mete, por lo menos por detrás. Y tampoco. La colegiala le provocó diciéndole: «Cómo me pone la Ley del Si es Si»… pero el Profesor, que había ido al acto a vender su libro. Le contestó: Hoy no. Te quedas sin recompensa. Quizá otro día. Llámame al Partido. Soy su Portavoz y Representante.
Y la colegiada, compungida y sin recompensas tuvo que abandonar la Fortaleza del Profesor…
En ese momento, hace 3 años, se quedó, como casi siempre le pasaba de pasar del mundo virtual al real, sin recompensas. Y ahora se lo cuenta a alguna redactora de Conspiranoicos de la Sexta, a las órdenes de la «Rasputín» de la República Bananera para promocionar su nuevo libro para su Fundación, y ésta le dice: Tú has sido totalmente despechada… y para eso está la Ley del «Sólo si es si». Sin presunción de inocencia. Sin Pruebas. A tomar por culo. Todo lo que te inventes irá a misa, que para eso nos hemos convertido en sumas sacerdotisas, nos hemos puesto sujetadores especiales para apretados los pechos para parecer planas, nos hemos vestido de blanco y puesto un cucurucho en la cabeza para convertirnos en el KKK del Puritarismo y de las JONS del Fraudillo y de la apariencia. Ahora si, en la intimidad somos más putas que las gallinas y nuestros hombres agotan todos los porros, substancias adictivas, vicios inimaginables y también los ritos del sapo en un plis plas… Sodoma y Gomorra ante la sede de nuestro PARTIDO es una tontería. Pues bien, como vemos que tienes pocas luces, yo creo que ninguna, vamos a escribirte lo que tienes que decir, te lo aprendes de memoria y lo repites como un loro a quien te entreviste. Te asignaremos como premio ser la presentadora de las 12 campanadas de Fin de Año y te compraremos un apartamento en la República Dominicana para que puedas retirarte como nuestros mandantes…
Y colorín, colorado, este cuento se ha acabado…
¿Nos hemos vuelto locos y ya somos totalmente idiotas?
Parece que si…
¿Qué nos dice Begoña G punto sobre el salido de Errejón del Cojón?
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